Pollo con ajonjolí

1. Lave el pollo con agua fría, seque y quite cualquier exceso de grasa. Corte el pollo en cubos de 3 centímetros y ponga en un tazón grande para mezclar. Agregue los ingredientes del marinado en el recipiente y revuelva para mezclar. Deje marinando mientras prepara la salsa.

2. Para hacer la salsa: Agregue a una sartén el aceite de ajonjolí y ponga a fuego lento. Añada el jengibre y el ajo, saltee hasta que estén fragantes, unos 2 a 3 minutos. Mientras tanto, combine los ingredientes restantes de la salsa en un tazón y mezcle bien para disolver la maicena. Vierta suavemente en la cacerola con el jengibre y el ajo frito. Revuelva mientras vierte la maicena porque se espesa con bastante rapidez. Mantenga caliente a fuego lento.

3. En una freidora ponga suficiente aceite para freír y caliente a 190 °C.

4. Fria el pollo en pequeñas cantidades, hasta que las piezas de pollo estén doradas y crujientes, aproximadamente de 5 a 6 minutos por lote. Retire el pollo con un colador de malla de alambre y escurra en toallas de papel. Sazone con un poco de sal, al gusto. Para servir, ponga el pollo frito en un plato y rocíe con la salsa. Espolvoree con una generosa cantidad de semillas de sésamo tostadas y adorne con ramitas de cilantro y cebollín.